La Iglesia sale a la calle en defensa de la vida en el trabajo

La Iglesia sale a la calle en defensa de la vida en el trabajo
La Plaza de Santa Teresa de Jesús de Ávila ha sido escenario de una concentración, organizada por la Pastoral del Trabajo de toda la Iglesia, dentro de las jornadas de ese fin de semana, para clamar: “¡No más muertes en el Trabajo! y esforcémonos en lograrlo”.

Tras la celebración de la Eucaristía en la Iglesia de san Pedro Apóstol, presidida por Abilio Martínez Varea, obispo responsable del Departamento de Pastoral del Trabajo, las personas que este fin de semana se han reunido, en Ávila, en las XVIII jornadas de esta área de la Conferencia Episcopal Española, se han desplazado hasta la céntrica plaza abulense.

Ataviados con chalecos reflectantes, los concentrados han formado un semicírculo alrededor de símbolos relacionados con la salud laboral, como un botiquín de primeros auxilios, cintas balizamiento, un delantal, un casco y otros componentes de los equipos de protección habituales entre los trabajadores, al tiempo que se iban ofreciendo los datos registrados de los accidentes y enfermedades laborales del país. 

Es la primera vez que las jornadas generales de Pastoral del Trabajo acogen una concentración pública. La situación alarmante de la siniestralidad laboral en nuestro país, que se cobra vidas, enferma personas y destroza familias demandaba, para los organizadores, una decidida respuesta por parte de la Iglesia, en coherencia con su apuesta por la vida.

Los delegados y delegadas diocesanas, los militantes de los movimientos especializados en el mundo del trabajo y todas aquellas personas interesadas en esta pastoral, cerca de un centenar, que habían acudido a Ávila han escuchado el testimonio de los repartidos que se juega la vida, llegando a perderla o verla seriamente lesionada, por las calles de la ciudad para entregar los pedidos, el de un joven que con su primer contrato de trabajo formal quedó atrapado por una máquina y murió en Barcelona, el de un padre de familia al que muerto al caerle parte de una pesada presa en Logroño y de otro joven que perdió la vida en una empresa de Sabadell cuando le ordenaron trabajar con una máquina en desuso con los sistema de seguridad desactivados. 

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Finalmente, se ha leído el comunicado con las conclusiones de las jornadas, en el que se ha reiterado la necesidad de fomentar la cultura preventiva en toda la sociedad, especialmente, en las empresas, de fortalecer la Inspección de Trabajo y la atención a las víctimas de la siniestralidad  y sus familias, así como combatir la precariedad laboral que dificulta la defensa ante los riesgos asociados al empleos.

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