A tu paso brota un manantial

A tu paso brota un manantial
Foto | pieonane (Pixabay)
Hay demasiadas situaciones trágicas –provocadas por injusticias, por incertidumbres, por abandonos, por desamparos– en las que tiembla nuestro corazón.

Y buscamos, entonces, certezas para afrontar esas malditas realidades. Y pedimos –como Felipe– conocer a Abbá, para sentir y construir hermandad. ¡No tiemble vuestro corazón!, nos dice Jesús (Jn 14, 1-12). El Abbá de Jesús y nuestro hace las obras que vemos en Jesús. Si damos crédito a Jesús haremos –hacemos– lo mismo que él: sus mismas obras, ¡y aún mayores! Yo las veo en el proceder de la militancia de HOAC que conozco, así como en muchas personas que no son militantes de HOAC. Y tú también las ves y también las haces. Gracias.

Contenido exclusivo para personas o entidades suscritas. Para seguir leyendo introduce tus datos o suscríbete aquí. Si no los recuerdas, haz clic aquí

¿Necesitas ayuda? ¿Algo que aportar?