Trabajadores cristianos de Málaga claman contra la siniestralidad laboral

Trabajadores cristianos de Málaga claman contra la siniestralidad laboral
Trabajadores cristianos de Málaga expresa su dolor y solidaridad con los familiares, amigos y compañeros del trabajador fallecido al caer desde un andamio por falta de medidas de seguridad

Un nuevo siniestro laboral se ha llevado por delante la vida de un trabajador de la construcción. La víctima de 47 años ha perdido la vida tras caer desde un andamio, el jueves 9 de mayo, en una obra en Torremolinos (Málaga).

La falta de medidas de seguridad es la causa que ha sido señalada como factor determinante en este accidente “traumático”, “perfectamente evitable y previsible”, según declaraciones sindicales realizadas en la última concentración de rechazo a esta plaga de siniestralidad laboral, en la que también han criticado a la Junta de Andalucía por falta de información.

En este sentido, la Hermandad Obrera de Acción Católica (HOAC) de la diócesis de Málaga muestra su sentir, a través de un comunicado, en el que expresa “nuestro dolor y solidaridad con los familiares, amigos y compañeros de este trabajador”.

En el marco del desarrollo de la campaña “Cuidar el trabajo, cuidar la vida“, este movimiento de trabajadoras y trabajadores cristianos está comprometido en denunciar públicamente la siniestralidad laboral –además de comunicados, convocando gestos que permitan visibilizar este drama– y en acompañar a las asociaciones de víctimas de accidentes laborales.

Problema social y político

Para esta organización de la Iglesia diocesana, la pérdida de vidas en el trabajo trasciende del ámbito laboral por todas las consecuencias que se derivan. “Es una realidad que exige el compromiso de toda la sociedad: Administraciones, empresarios, trabajadores, sindicatos, partidos políticos, asociaciones, etc. ya que es un problema social y político”.

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En coherencia con los principios de la Doctrina Social de la Iglesia, este movimiento especializado de Acción Católica subraya el deber de “recordar siempre la dignidad y los derechos de los hombres [y mujeres] del trabajo, denunciar las situaciones en las que se violan dichos derechos, y contribuir a orientar estos cambios para que se realice un auténtico progreso del hombre y de la sociedad”.

Por eso, la HOAC enfatiza que el valor del trabajo reside en la dignidad inherente de la persona que lo realiza, y no en la rentabilidad económica. “Dios quiere que el trabajo sea para la vida, y no al contrario. El trabajo es para la vida. ¡Ni una muerte más!”, exhortan.

 

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