Jóvenes trabajadores cristianos se movilizan para mejorar un barrio de Alicante

Jóvenes trabajadores cristianos se movilizan para mejorar un barrio de Alicante
Una jornada de reflexión y acción comunitaria dejará “su huella” para mejorar el barrio ante el abandono del Ayuntamiento de Alicante.

La Juventud Obrera Cristiana (JOC) de la diócesis de Orihuela-Alicante lleva denunciando, desde finales de año, la situación de abandono de la zona Norte de Alicante.

“Seguimos sin tener un buen alumbramiento en zonas residenciales y peatonales, socavones en las carreteras y carriles bici, y las calles hundidas literalmente”, demanda Imanol Morales, militante de la JOC. Y el ayuntamiento de la ciudad “sigue sin manifestarse”, ante los planteamientos de los jóvenes trabajadores del barrio.

Lejos de resignarse a la nula respuesta institucional, la militancia de la Juventud Obrera Cristiana de la diócesis, ha decidido comprometerse y “pasar a la acción y reaccionar de manera comunitaria a esta situación ofreciendo a las jóvenes del barrio y a las vecinas y vecinos, en general, unas jornadas participativas de acción-reacción“, según cuenta Morales.

Las jornadas tendrán dos días de desarrollo. Este sábado 18 de marzo y el próximo sábado 25 a las 10h en los jardines de la Parroquía Nuestra Señora del Carmen en la zona Norte de la ciudad.

“Estaremos en los jardines, en las calles, dónde se nos vea”, apunta Morales, para desarrollar una acción reivindicativa y participativa, “un espacio abierto y comunitario a todas las vecinas y vecinos, que puedan compartir sus necesidades y las preocupaciones del barrio. Hacernos protagonistas en él, pues cada vecina, cada vecino, puede aportar mucho al barrio y su mejora”, destaca este militante de la JOC.

Adoquines con demandas

Además, en la segunda convocatoria de la jornada van a implicarse en mejorar “literalmente” el barrio arreglando las aceras con la colocación de adoquines personalizados para dejar la “huella” de sus demandas.

“Ante la falta de adoquines en las aceras, que más de un susto y caída han sufrido distintas personas, proponemos un espacio en el que personalizar, a través de la pintura, nuestros propios adoquines, para cada vecina y cada vecino deje su huella y personalidad, y así reconstruir el barrio”, subraya Morales.

Esta dinámica de la jornada pretende favorecer la toma de conciencia conjunta “de nuestra dignidad”, dice Morales, “así como la mejora de la realidad del propio barrio”, concluye.

 

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