Bridgestone y Michelin anuncian ajustes temporales de empleo
La dirección de Bridgestone en España ha comunicado a la plantilla su intención de aplicar un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) para 2.800 de sus personas empleadas en las cuatro fábricas de país, mientras que la representación de los trabajadores pide más información y garantías de viabilidad.
La planta de Puente San Miguel en Cantabria, que cuenta con una plantilla de 426 personas y que se dedica a la producción de cubiertas agrícolas y de camión, será la más afectada con el cierre de 117 días, desde diciembre de este año hasta septiembre de 2024.
Para la fábrica de Basauri en Bizkaia, dedicada a la producción de cubiertas de camión, el paro de la producción durará 75 días en periodos alternos desde diciembre de 2023 hasta octubre de 2024, afectando a 890 personas trabajadoras.
En Usansolo, también en Bizkaia se verán afectados por el cierre temporal, que se aplicará durante 56 días, de diciembre a septiembre de 2024, a 43 personas. Además, la planta de Burgos, que cuenta con una plantilla de 1.455 personas, cerrará durante 9 días.
La filial española de la multinacional japonesa convertida en el primer fabricantes de neumáticos de mundo, ha justificado esta medida por la caída del mercado de cubiertas agrícolas, con el consiguiente aumento de las existencias, aunque también ha explicado su intención de centrarse en las actividades con mayor margen de beneficios.
La representación de los trabajadores ha solicitado mayor precisión sobre la situación actual de la empresa y sus planes a largo plazo, con el objetivo de poder valorar la adecuación del ajuste solicitado y ha reclamado medidas que garanticen el mantenimiento del empleo. La regulación temporal de empleo supone, denuncia, “la pérdida de volumen de venta”, además de “una pérdida económica para la plantilla” y “un gasto al erario público”.
El secretario general de CCOO en Bridgestone España, Igor Mena, ha puntualizado que “el año pasado los resultados fueron buenos”, por lo que no entiende del todo que la empresa afirme ahora que “tenemos cubiertas con las que el margen de beneficio es negativo o muy pequeño”, salvo que su única intención sea “continuar con la mejora de los resultados de la compañía”.
Después de tres reuniones de la mesa negociadora del ERTE, a poco más de una semana para el fin del periodo de legal de consultas, la parte social ha comunicado que no se han producido avances en la negociación con la dirección y puntualiza “que algunas respuestas no cumplen con lo que habíamos solicitado” y reclaman garantías de futuro para la plantilla, lógicamente preocupada y a la expectativa de que se aproximar posturas.
Otra empresa del sector de los neumáticos, Michelin, también ha anunciado paradas en la producción en su planta de Vitoria. La dirección de la factoría ha comunicado al comité la decisión de prescindir de 150 de los en torno a 3.500 empleados de la planta, la más grande de la multinacional francesa en nuestro país, cambios en el calendario para unos 650 personas en fabricación y la paralización de las inversiones previstas para los próximos tres años por valor de 75 millones de euros, con la justificación de que las malas previsiones económicos para el próximo año.
Redactor jefe de Noticias Obreras
