David Holmes: el chico que sobrevivió
David Holmes: el chico que sobrevivió (2023)
Nacionalidad: Estados Unidos
Dirección: Dan Hartley
Intérpretes: Documental
Plataforma: HBO
Vaya por delante que no soy seguidor acérrimo de la saga de Harry Potter ni de su universo. Con el paso de los años, eso sí, me he ido relacionando con el mundo mágico creado por J. K. Rowling y tengo cierta visión de conjunto. ¿Esto es un requisito para entender el documental titulado David Holmes: el chico que sobrevivió? No, de ninguna manera. Se puede ver aunque nunca hayas oído hablar del niño mago ni de su escuela de magia.
Se trata de una pieza documental de casi hora y media que narra la experiencia en primera persona de David Holmes, el doble de acción de Daniel Radcliffe (Harry Potter) que sufrió un accidente durante el rodaje de una de las películas de la saga. Como consecuencia de aquello, se fracturó la columna y perdió la movilidad de su cuerpo. Esa es la premisa básica. A partir de ahí, la cinta resulta interesante en tres parcelas distintas.
En primer lugar, no muestra la discapacidad como ejemplo de nada. Los discípulos de Cristo hemos caído demasiadas veces en el error de mirar a la persona discapacitada con ojos intoxicados de asistencialismo, gozosos de observar una cierta «pornografía de la discapacidad», cuyo único fin es hacer sentir agradecimiento en la persona que no vive con las mismas limitaciones. En este documental, la discapacidad de David Holmes se muestra como parte integral de su persona, no como lo único que le define.
Por otra parte, llama la atención la pasión de este joven por la vida. Podríamos entrar a valorar la moralidad de ciertos excesos o conductas, por supuesto. Sin embargo, creo que es mucho más interesante y positivo detenerse a contemplar la arrolladora fuerza vital de David Holmes, capaz de transformar un entorno con el que puede interactuar de manera limitada. A través de la actitud, pero sobre todo de la palabra, consigue generar cambios visibles en las comunidades por las que pasa, poniendo en práctica esa transformación de los corazones que antecede a la de las estructuras, algo que ha repetido en más de una ocasión el papa Francisco.
La tercera cuestión interesante, más relacionada con el ámbito del mundo obrero, empuja a realizar un razonamiento profundo sobre el propio empleo de doble de acción; personas habitualmente anónimas que, literalmente, se juegan la vida para que rostros mundialmente conocidos no reciban demasiados rasguños durante el rodaje. Todo ello a cambio de salarios que están muy lejos de las obscenas cifras que se manejan en algunas producciones.
En líneas generales, el documental sobre David Holmes se aleja bastante del mundo mágico de Rowling aunque se haga mención constante a la saga de Harry Potter. No obstante, lo que sí permite la cinta es transitar senderos mucho menos imaginarios que tienen que ver con el techo, el trabajo, la vida y la fragilidad. A ello contribuye la estructura narrativa, que recuerda en cierta medida a un Ver, Juzgar y Actuar: Observar la discapacidad, analizar su implicación y proyectar el futuro desde ella.
Animador digital y Motion Designer
