Rafa Ceballos tiene 35 años y ha pasado los últimos 15 trabajando en la factoría que la multinacional francesa Schneider tiene en Griñón, un pueblo de la Comunidad de Madrid
Rafa Ceballos tiene 35 años y ha pasado los últimos 15 trabajando en la factoría que la multinacional francesa Schneider tiene en Griñón, un pueblo de la Comunidad de Madrid