Continúa la huelga en Ryanair, a pesar de las represalias
A pesar de los siete despidos y 100 reuniones disciplinarias por secundar la huelga, los trabajadores de Ryanair han convocado nuevas jornadas de paro por las “ilegalidades” que sigue cometiendo la compañía
Tras la huelga de junio, están previstas 11 nuevas jornadas en la segunda quincena del presente mes que afectan a los diez aeropuertos en los que opera la aerolínea irlandesa, que se suman a los seis días de huelga en EasyJet en tres bases españolas.
Ryanair sigue sin aplicar la legislación laboral española, según USO, por lo que los tripulantes de cabina de pasajeros siguen sin tener derecho a los 22 días laborables de vacaciones anuales, ni los 14 festivos nacionales; se obstaculiza el acceso a los derechos de reducción de jornada por guardia legal y/o cuidados de familiares y a la reducción de jornada.
Los trabajadores no reciben sus nóminas siguiendo el modelo legal ni en castellano; no se respeta la normativa de Prevención de Riesgos Laborales o siguen sin entregar agua en los aviones a sus tripulaciones, por ejemplo.
Los sindicatos reclaman el respeto a los derechos laborales básicos y el cumplimiento de las sentencias judiciales, por lo que presionan a la dirección para que vuelva a la mesa de negociación del convenio colectivo. Ryanair es la única compañía internacional en nuestro país sin convenio colectivo”, ha explicado Lidia Arasanz, secretaria general de la sección sindical de USO en Ryanair.
La dirección de Ryanair ha respondido a la reivindicación de los trabajadores con siete despidos fulminantes por no haber obedecido las órdenes de la aerolínea irlandesa durante los días de huelga, tres en la base de Málaga, dos en Barcelona, uno en Girona y otro en Santiago de Compostela.
Ataque al derecho de huelga
Los representantes de los trabajadores de Ryanair de USO y Sitcpla han asesorado al menos a otros 100 trabajadores citados a reuniones disciplinarias. La Inspección de Trabajo había advertido a la empresa de que debían cumplir la legislación española sobre el derecho de huelga, que no permite cambiar la programación de una persona asignada a un vuelo que fuera servicio mínimo, ni pretender que los trabajadores aceptaran las notificaciones en tiempos de descanso.
Ambos sindicatos denuncian además que tripulantes de Portugal, Reino Unido e Italia han operado vuelos correspondientes a centros de trabajo españoles. En concreto, Barcelona, Valencia y Málaga, con el agravante de que los británicos son, además, personal extracomunitario.
Estás prácticas están engordando el expediente de irregularidades de la compañía que impone también guardias de más de un día, a pesar de que no lo permite una resolución ministerial. “Un suma y sigue de denuncias que se le acumulan a Ryanair en los juzgados y en Inspección sin que nadie más que los trabajadores y sus sindicatos den la cara por ellos”, advierte Ernesto Iglesias, responsable de Vuelo de USO-Sector Aéreo.
En la primera jornada de huelga del 12 de julio, de las doce convocadas por USO y Sitcpla en Ryanai se han cancelado 15 vuelos y al menos otros 234 han sufrido retrasos con origen o destino en alguna de las diez bases que Ryanair tiene en España.
Las cancelaciones se están produciendo, comenta Iglesias, a pesar de los servicios mínimos abusivos impuestos por la empresa y aprobados por el Ministerio de Transportes.
La asociación de consumidores FACUA ha recordado en estos días que el Reglamento Europeo 261/2004 establece una serie de compensaciones en caso de cancelación de los vuelos y que una sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) de abril de 2018 determinó que una huelga de trabajadores no se considera dentro del concepto “circunstancias extraordinarias” –que exime de entregar las cantidades– por lo que la compañía tampoco puede negarse a las compensaciones que se le exijan.
Redactor jefe de Noticias Obreras
