Tejer redes de ciudadanía

Tejer redes de ciudadanía
Imagen | Alek Po (vecteecy)
A veces se nos transmite la sensación de que el mundo digital nos lleva al aislamiento y es radicalmente opuesto a tejer redes de fraternidad entre las personas.

Sin embargo, también es una ventana abierta para descubrir nuevas posibilidades de acompañar en la vida cotidiana, apoyar el cambio de las instituciones y dar visibilidad a iniciativas que cambian el modelo económico dominante.

Cooperativas de energía renovable

Una de las iniciativas más interesantes para cambiar el modelo imperante y tejer redes de ciudadanía son las cooperativas de consumo de energía eléctrica. Son alternativas a las grandes compañías eléctricas que merece la pena conocer aprovechando su presencia digital.

Se trata de comercializadoras de luz exactamente igual que las grandes compañías eléctricas, es decir, son los encargados de facturar la luz que nos llega a casa. La primera diferencia reside en que su funcionamiento es en modo de cooperativa, lo que nos permite participar activamente en las decisiones que se tomen y aunar esfuerzos con otras personas que apuestan por este modelo, asegurándonos también de que los posibles beneficios se reinvierten en energía limpia.

Y es que la segunda diferencia es que apuestan por la energía exclusivamente renovable, comprando energía limpia en el mercado mayorista y, en muchos casos, generando electricidad solar o eólica. Por último, cabe reseñar que nunca hay una permanencia o que las tarifas se ajustan mucho al coste de producción, ya que son cooperativas sin ánimo de lucro.

Hay muchas cooperativas operando en distintas regiones, una de las pioneras y de mayor implantación es Som Energía con más de 84.000 socios y socias, en distintas regiones operan GoiEner, Energética, Nosa Enerxia, La Corriente y muchas más agrupadas en Unión Renovables.

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Revuelta de mujeres en la iglesia

Una de las iniciativas más apasionantes dentro de la Iglesia que han ido brotando en estos últimos meses es la Revuelta de mujeres en la Iglesia. Un ejemplo de que las redes sociales no son solo un espacio negativo en el que volcar frustraciones o malgastar el tiempo, sino que son espacios de construcción de redes, de apoyo y visibilización de alternativas al modelo cultural dominante. No solo permite estar al tanto de los actos convocados, sino también difundirlos (mediante reenvío o retuit), manifestar apoyo (los «me gusta»), dar nuestra opinión o alzar nuestra voz (comentarios, mensajes).

El enlace a todas sus redes sociales está disponible a través de LinkTree, que es una herramienta que permite unir diversos enlaces a diferentes redes sociales en una sola página.

Nextdoor

Se trata de una red social de barrio, destinada a crear barrio, a que el vecindario se conozca y colabore en cosas tan básicas como prestar o regalar objetos que no usemos, pedir ayuda para alguna pequeña tarea y, por supuesto, ofrecernos a colaborar con personas de nuestro entorno o incluso de nuestro edificio que tal vez ni conozcamos en persona.

A través de una página web o una aplicación de móvil, nos registramos indicando el barrio en el que nos encontramos y, a partir de ahí, tendremos disponibles varios tablones de anuncios: publicaciones de información o eventos en el barrio, mercadillo de préstamo o compra-venta, grupos creados por el vecindario con motivos concretos (por ejemplo aprender un instrumento, pasear a las mascotas, ejercicio al aire libre).

 

 

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